[vc_row][vc_column][vc_column_text]La agrupación defensora de los animales Mercy For Animals retomó las denuncias que han hecho activistas de comunidades mayas contra granjas porcícola, y en una investigación realizada mediante drones exhibió la contaminación de estas instalaciones en varias partes de Yucatán.
Los drones de Mercy For Animals también sobrevolaron granjas de pollos, donde documentaron el maltrato contra las aves, pero lo que más horrorizó a los activistas internacionales es la grave contaminación de las granjas porcícolas.
Mark Devries, piloto de drones certificado de Mercy For Animals y Director de este documental, se trasladó a Yucatán para obtener pruebas del daño ocasionado en el área por las granjas.
Un investigador encubierto mexicano condujo a Devries a través de pequeñas ciudades y caminos estrechos para poder documentar estas enormes granjas industriales que están apropiándose de la selva circundante. Devries declaró sentirse horrorizado por lo que vio:
“He visto docenas y docenas de granjas industriales a lo largo de los años, pero nunca he visto nada a la escala de lo que se ha construido ahí”, expresó.
El dron capturó imágenes de enormes instalaciones, entre ellas una granja de pollos con cerca de 100 edificios, cada uno con miles de aves confinadas. Las imágenes de las granjas de cerdos son quizás las más impactantes.
Devries dijo: “Nada de lo que vi fue más aterrador que las instalaciones en donde confinan a los cerdos. Hay miles de ellos en estos lugares y producen tantas aguas residuales que llenan estanques gigantescos”.
Las imágenes muestran una red de drenaje que arroja millones de litros de desechos no tratados a los estanques aledaños a las granjas. Instalaciones como estas pueden producir más aguas residuales que una ciudad pequeña, y estos desechos pueden contaminar el aire y los suministros de agua locales, y poner en peligro a las personas que viven en los alrededores.
El presidente de la Asociación de Porcicultores de Yucatán afirmó que tan solo en 2018, 2.2 millones de cerdos fueron criados para la producción de carne en ese estado, publica el periódico peruano El Comercio, quien publicó el reporte de Mercy For Animals.
Las comunidades en Yucatán, entre ellas los ciudadanos organizados de Homún y de San Antonio Chel, están luchando contra estas enormes granjas industriales por la contaminación del agua y del aire que han ocasionado.
A principios de año se evidenció que una granja de Kekén en el municipio de Kinchil estaba arrojando al manto freático agua sin tratar, al grado de que había formado una laguna de aguas negras que estaba matando toda vida a su alrededor. (Con información de Mercy For Animals y El Comercio)[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]