El tráfico de aves ha variado en Yucatán, por lo que el ilegal comercio se realiza a través de las redes sociales, afirmó el encargado del despacho de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), Jesús Arcadio Lizárraga Véliz, al revelar que el año pasado se desarticuló dos páginas electrónicas, al ubicar el predio de los coordinadores.
Destacó el vínculo que se tiene con la policía cibernética de la Fiscalía General del Estado (FGE), ya que permitió ubicar a los que vendías aves por Internet.
“Para que los inspectores de la Profepa puedan intervenir se requiere del domicilio donde se comete ilícito, de ahí la importancia del vínculo con la FGE”, abundó.
Reconoció que son los loros los más cotizados, pero desafortunadamente, los más maltratos reciben por parte de los comerciantes.
Actualmente, se utilizan las redes sociales para el ilícito comercio de aves, en especial de psitácidos, es decir, diversas especies de loros.
La problemática se complica debido a que en los pueblos se tiran los árboles y se daña el hábitat de estas aves.
Comentó que desafortunadamente, en Yucatán, principalmente, en el interior del Estado, es arraigado el tener aves en cautiverio, en especial, los dominicos y chinchibacales, además de los cardenales, azulejos, entre otros.
