[vc_row][vc_column][vc_column_text]Trabajadores del área de checadores del Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán (HRAEPY) colocaron una manta en la que acusan a su líder sindical, Alejandro Solís Campos, de vender plazas o de entregarlas a sus familiares y allegados, en lugar de distribuirlas entre el personal más antiguo.
Molestos por lo que consideran una arbitrariedad, un grupo de trabajadores viajó en representación a la Ciudad de México, para pedirle al diputado Marco Antonio García Ayala, líder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA), la destitución de Solís Campos como secretario general de la sección 100, con sede en Yucatán.
Los inconformes señalan que una de las plazas que reclaman se le otorgó a la sobrina de Alejandro Campos, y también salieron beneficiados familiares de varios integrantes de su comité sindical.
El abril pasado, Campos Solís y un reducido grupo de sus seguidores armó un alborotó en el HRAEPY para chantajear y presionar de manera ilegal a las autoridades del hospital, incluso tomaron algunas áreas con el pretexto de que había carencia de insumos médicos y medicamentos. También reclamaban mejoras salariales.
De acuerdo con las autoridades del HRAEPY, los inconformes eran apenas el 3.4 del total de los trabajadores del hospital, y a final de cuentas se liberaron las instalaciones.
En aquel entonces se mencionó que el trasfondo de las presiones fue con el afán de llamar la atención de cara a la sucesión sindical.
En ese contexto trascendió un audio donde se evidencia al líder sindical “cobrando” favores, prácticamente extorsionando, al encargado del comedor del nosocomio, a quien le pide “efectivo” y luego 20 kilos de cochinita para agazajar a gente del sindicato nacional.
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