[vc_row][vc_column][vc_column_text]Dieciocho grados centígrados es la temperatura ideal para tomar un rico vino tinto, en este caso francés, en Yucatán. Y si usted no tiene una cava y el clima de acá parece un impedimento, coloque la botella en el refri 15 minutos antes de descorcharla. Y después ¡Salut!
Y si quiere probar nuevos vinos franceses de la variedad Beaujolais (vinos jóvenes) no puede perderse la 5ta edición de la “Fiesta del Vino Nuevo o Beaujolais Nouveau 2017”, que se llevará al cabo del jueves 16 próximo en el Hotel Ibis (Calle 58ª N° 495, a un costado del Monumento a la Bandera).
El francés Renaud Lignelet es importador y distribuidor de vinos franceses, dueño de “La Cava de Moliere” y organizador del evento junto con el Hotel Ibis, la Alianza Francesa, Café Creme, L’Escargot y Bistro Cultural. En plática con Yucatán Ahora explica que, desde su llegada a Yucatán hace ocho años, el consumo de vino en el Estado va creciendo mucho y se nota “demencialmente” (en sus palabras).
“Cuando llegué había tres o cuatro marcas y ahora la oferta y demanda aumentó diez veces y se pueden conseguir no sólo en restaurantes y en lugares especializados, sino hasta en supermercados”, señala.
Los yucatecos los prefieren jóvenes
¿Y qué vino prefieren los yucatecos? Le preguntamos. Renaud no duda en responder: “Prefieren un vino tinto afrutado y fresco, joven y no tan complejo”, sentencia.
Aunque la temperatura ideal para descorchar un vino aquí es de 16 a 18 grados, en el caso de un vino más estructurado, tánico y con más cuerpo (como un borgoña o un bordeaux), el especialista francés recomiendo más amplitud térmica. “Tomar un vino en la temperatura correcta te permite ver qué tiene, cómo se compone… Y ahí explota y se abre”, detalla.
Para Renaud hay muchos platillos yucatecos que “maridan” perfectamente con vinos franceses jóvenes y frutales como el ceviche o una parrillada. Hoy día cuenta que desde jóvenes hasta adultos los prefieren. “Tomar vino es ‘nice’, permite la convivencia y, además, hace bien a la salud”, explica.
Sobre la 5ta edición de la Beaujolais Noveau 2017, cuenta que es un fenómeno mundial que celebra la llegada del “nuevo vino”. Renaud detalla que la cosecha es de la región francesa de Beaujolais, que ocupa desde el sur deMâcon hasta los alrededores de Lyon, y está limitado al este por el valle del Saona. Las viñas alcanzan una altitud de cerca de 500 metros.
Los vinos de Beaujolais pueden beberse jóvenes, para acompañar carnes a la brasa, embutidos suaves y quesos. Los vinos de los Crus se beben con comidas más fuertes. El Beaujolais Nouveau se debe beber muy joven. Luego de la cosecha en octubre, se realiza la fermentación alcohólica, el prensado y el embotellado, todo en corto tiempo. Recién se pueden vender estos vinos jóvenes, frutales y cargados de acidez a partir del tercer jueves de noviembre.
Arte, gastronomía, vino y cultura
En el evento del jueves, que comenzará a las 8 de la noche en los jardines del Hotel Ibis, participarán los grupos musicales Jazz Manouche, un dueto que interpretará temas de la película francesa Amelié y Le Pot (“Los cuates”), que hacen música francesa y española.
También habrá un desfile de moda de vestidos de una empresa yucateca, una plática que ofrecerá Thierry Pouzargues (del Hotel Ibis) junto con Renaud sobre vinos (que también se podrán comprar en distintas variedades y a buen precio), seis stands para degustar platillos variados franceses y una exposición de dibujos en distintas superficies realizados por la artista Gema Ríos.
Por su parte, Ana Rosa Pech Pérez, representante de la Alianza Francesa, explica que el evento es totalmente convivencial y espera que los visiten grandes y chicos.- Cecilia García Olivieri.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]