- El senador resaltó la incertidumbre que atraviesan por la falta de basificación.
Para festejar y apapachar a los docentes en el marco del Día del Maestro, el Senador Jorge Carlos Ramírez Marín organizó un almuerzo donde se congregaron cientos de profesores en una tarde amena y de sonrisas.
En ese tenor, en días pasados, el legislador realizó un posicionamiento vía redes sociales en que reconoció la gran responsabilidad de moldear, enseñar y forjar a las nuevas generaciones que tienen los maestros, pero con una realidad que los golpea y lacera: la inseguridad laboral.
“Aunque dan todo de sí cada día al frente de las aulas, hay cientos de maestros que no saben si el próximo período escolar tendrán o no trabajo, porque llevan algunos años en un esquema de contrato que, una vez terminado, solo pueden esperar que haya la buena voluntad de que sean renovados”, lamentó el legislador.
En el marco del Día del Maestro, Ramírez Marín indicó que algunos de estos casos son maestros que debido a que sus contratos fueron en escuelas de los municipios más remotos, han tenido que dejar todo, familia y amigos y mudarse, todo por la vocación de enseñar, pero este sacrificio no ha sido debidamente remunerado.
“Es una tremenda injusticia y para mí es una prioridad que esto tenga una solución, porque no son uno a dos, son muchísimos los que viven en una constante inseguridad laboral”, agregó.
Esta situación se agrava debido a que trabajan sin una base y pueden estar meses, o incluso años, pero no acumulan los derechos que tienen aquellos docentes con una base, como lo puede ser la antigüedad y un sinnúmero de prestaciones.
Sin embargo, esto no soslaya su espíritu de servicio y la vocación de enseñanza que tienen, pues saben que en sus manos está el gran honor y responsabilidad de forjar a los niños y jóvenes de nuestro estado y todo el país.
