La violencia económica persiste en la capital yucateca y aumenta en diciembre debido al alto consumo de alcohol, se advirtió el Instituto de las Mujeres de Mérida, al señalar que esta forma de agresión priva a cientos de mujeres y a sus hijos del sustento básico y puede convertirse en un antecedente de la violencia vicaria.
Para atender este problema, el Instituto realiza brigadas casa por casa, actividades comunitarias y campañas centradas en visibilizar la violencia económica, aún poco reconocida por la ciudadanía. Hasta octubre, el Instituto registró cerca de 14,000 servicios brindados, número que podría aumentar al cierre del año debido a diversas campañas y a la intensificación de la problemática en temporada decembrina.
La directora, Yahayra Guadalupe Centeno Ceballos, destacó la importancia de fortalecer la colaboración con el DIF y otras instituciones para garantizar atención oportuna a las mujeres. También recordó que en casos de violencia sexual es fundamental actuar dentro de las primeras 72 horas para acceder a todos los servicios disponibles.
La funcionaria señaló que la violencia sexual sigue siendo una de las principales problemáticas, especialmente en mujeres con discapacidad, quienes enfrentan una doble vulnerabilidad.
Agregó que se trabaja con enfoque de interseccionalidad y resalta la importancia de las redes vecinales como apoyo ante posibles complicidades familiares. Por ello, se impulsa el uso de la línea anónima 089, herramienta clave para denunciar situaciones de riesgo y contribuir a prevenir agresiones.




