La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA) clausuró este martes los terrenos donde la empresa MAPSA realizaba desmontes ilegales en la Reserva Ecológica Cuxtal, al sur de Mérida.
La acción se dio tras la denuncia de ambientalistas, quienes sorprendieron a empleados de la empresa utilizando maquinaria pesada para derribar árboles en una zona cercana al banco de materiales de MAPSA.

De acuerdo con los activistas, el pasado fin de semana (sábado y domingo) la empresa desmontó aproximadamente 80 mil metros cuadrados de selva baja, sin que ninguna autoridad interviniera en ese momento.
La presión social y la denuncia formal interpuesta por el Ayuntamiento de Mérida obligaron a la PROFEPA a intervenir y colocar los sellos de clausura en el predio afectado.
Sandra García Peregrina, secretaria técnica y directora operativa de la Reserva Ecológica de Cuxtal, confirmó que el 25 de marzo interpuso una denuncia contra quien resulte responsable del desmonte de al menos ocho hectáreas dentro del área protegida.

La denuncia fue respaldada con mapas temáticos, memorias fotográficas, coordenadas geográficas y análisis técnicos, evidencias que permiten vincular la actividad ilegal con violaciones a varias leyes, entre ellas:
• La Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA)
• La Ley General de Desarrollo Forestal Sustentable (LGDFS)
• La Ley Federal de Responsabilidad Ambiental (LFRA)
• El Programa de Manejo de la Zona Sujeta a Conservación Ecológica “Reserva Cuxtal”
Aunque ambientalistas celebraron la colocación de los sellos de clausura, advirtieron que esto no garantiza una sanción definitiva, ya que en otras ocasiones MAPSA ha evadido responsabilidades con el respaldo de funcionarios que, aseguran, han actuado con complicidad o negligencia.
También mostraron su descontento con el del director de Medio Ambiente y Bienestar Animal, Raúl Escalante, quien prácticamente exoneró a la empresa al declarar que la zona afectada “ya había sido impactada con anterioridad”.
Sin embargo, Yucatán Ahora cuenta con fotografías y videos aéreos donde se aprecia claramente que la selva se encontraba intacta antes de la intervención de maquinaria pesada.
La comunidad ambientalista pide que las investigaciones continúen y que se garantice la protección real de la Reserva Cuxtal, considerada uno de los pulmones ecológicos más importantes del sur de Mérida.