Todo el sentimiento, paz, fraternidad y el cúmulo de emociones que proyecta la música clásica y el jazz, se pudo disfrutar anoche, en el Concierto de Michael Squillace, maestro del saxofón, quien por primera ocasión se presentó en la Sala de Conciertos del Palacio de la Música.
Squillace ya ha cumplido anteriormente con otras actuaciones en Yucatán, donde incluso ha ofrecido capacitación y proporcionado sus conocimientos dentro del ámbito musical.
“Significa muchísimo para mí, he tenido la oportunidad de tocar en el Palacio de la Música, en otras áreas, anteriormente, también de haber dado una Máster Class, pero estar en la sala de conciertos representa mucho, sobre todo poder contar con otros músicos también”, indicó.
“Empecé mi carrera musical como muchos comienzan, después de la preparatoria, interesándome en diferentes proyectos, también en diversas áreas de la música y estudiando con grandes músicos”, dijo.
“Me considero un clarinetista clásico principalmente, pero también tocó jazz en clarinete, saxofón y flauta, e igual soy compositor”, apuntó.
De hecho, interpretó una melodía de su autoría con la participación nueve músicos yucatecos, con viola, violín, violonchelo, oboe, otra saxofonista y un pianista.
La velada incluyó siete piezas musicales, las primeras acompañadas del pianista yucateco, Jorge Piña Sosa, estilo clásico y jazz, donde Squillace deleitó a los asistentes con el saxofón, clarinete y flauta.
Al final, se proyectó el ensamble de los nueve exponentes locales, una pequeña orquesta, con la melodía de su composición.
Michael Squillace se dio tiempo para enviar un mensaje a las nuevas generaciones de músicos, sobre todo los yucatecos.
“Primeramente, no se rindan, que sigan tocando, continúen ensayando, eso es lo más importante, y en segunda, no dejen de practicar, conocer su valor y no dejen que nadie tome ventaja de ustedes”, finalizó.