El anuncio realizado por el presidente Donald Trump de un inmediato proceso de deportación de inmigrantes, mantiene en incertidumbre a poco más de 90 mil familias yucatecas que reciben remesas mensualmente desde Estados Unidos. El Indemaya informó que, poco más de 78 municipios se benefician de estos millonarios recursos.
La potencial deportación de cerca de 110 mil yucatecos radicados de manera ilegal en Estados Unidos, establece una condición de incertidumbre para miles de personas que mensualmente cobran beneficios de las remesas que llegan a nuestro estado. Según fuentes del Banco de México en 2024, el monto anual de envíos superó los 222 millones de dólares, esto es, unos 4 mil 573 millones de pesos, al tipo de cambio actual.
El inicio de la administración Trump ha puesto sobre atención a una posible deportación masiva en Estados Unidos, lo que advierte una serie de problemas para cientos de personas que tienen beneficios mensuales de sus familias radicadas en ese país.
El Indemaya informó que, la dispersión de recursos via remesas se distribuye en al menos 78 municipios yucatecos, primordialmente: Mérida, Oxcutzcab, Tekax, Akil, Tizimín, Hunucmá, Motul y Peto, por señalar los más importantes.
El Indemaya destacó en su momento que, gran parte de estos recursos que se reciben desde el extranjero sirven para gasto corriente de las familias, además de pequeñas inversiones en micro y pequeñas empresas, comercios y negocios que serán afectados, de concretarse una expulsión de connacionales.
Sin embargo, este día el gobierno federal anunció la entrega de una tarjeta de 2 mil pesos en la zona de la frontera para aquellos migrantes que puedan ser expulsados y puedan retornar a sus estados originarios; sin embargo, las condiciones de los miles de yucatecos radicados en Estados Unidos es compleja y no depende de 2 mil pesos.
El Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya en Yucatán ha señalado que, tras la pandemia del Covid 19, en 2020, el flujo de migrantes yucatecos se incrementó y la estimación actual de connacionales en territorio estadounidense supera las 500 mil personas, que en su gran mayoría son ilegales y se dedican a tareas administrativas y de servicios, primordialmente en la costa Este, en los estados de California, Oregón, Nuevo México, Tejas y Nebraska.