El desmedido abuso de promotores de lotes de inversión está ocasionando una burbuja en el sector inmobiliario en los municipios de Mérida, Izamal, Valladolid, Hunucmá y la zona costera advirtió Enrique Trava Griffin, presidente de Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios en Mérida.
Aseveró que, Hunucmá es uno de los municipios más afectados por la lotificación de grandes extensiones de tierra en la zona costera que muy posiblemente nunca puedan ser transformados en vivienda o recuperarse como inversión. Explicó que, en Yucatán hay un estimado de 10 mil personas que se autonombran asesores inmobiliarios sin tener capacidades, información o una realidad de lo que se está realizando en este ramo económico.
Insistió en la necesidad de aprobar una ley reguladora para la profesionalización de los asesores inmobiliarios y con ello, establecer reglas claras y certeza jurídica para las personas que adquieren un patrimonio. Dijo que, si bien la oferta inmobiliaria en Yucatán es aún equilibrada, los proyectos como el ferrocarril Mérida-Cancún está ocasionando un crecimiento desmedido de fraccionadores en Izamal, Valladolid, Pisté.
Abundó que, “gran parte de estos asesores inmobiliarios son informales”, no cuentan con las capacidades, información, conocimientos y requerimientos para vender dichas propiedades, que se aprovechan de autoridades municipales y lotifican amplias extensiones que no tienen uso de suelo, permisos y condiciones para desarrollo de vivienda.
Manifestó que si bien, Yucatán mantiene un ritmo de crecimiento poblacional importante, gran parte de la vivienda que se está construyendo es de calidad media, residencial y se ha reducido de manera importante la construcción de vivienda de interés social, lo que será una desventaja para cientos de familias que buscan una propiedad.
Abundó que, como meta específica, AMPI busca que sus 188 asociados respondan a un compromiso de responsabilidad social; sin embargo, agregó, “aún estamos en pañales” en este tema, falta mucho por responder a los compromisos de sustentabilidad en el sector y por ello el municipio de Mérida y la zona conurbada sufrirán una serie de probleas por la sobre densificación en áreas y zonas sin servicios, comentó.
Trava Griffin insistió en la necesidad de que las autoridades estatales y el Congreso del Estado aprueben el paquete de leyes inmobiliarias que permitirá un equilibrio al crecimiento desordenado que está padeciendo tanto Mérida, como los municipios cercanos, en especial la zona costera que está siendo afectada de manera importante.
Añadió que, la denominada “mafia inmobiliaria” está centrada en aspectos registrales, donde intervienen autoridades como Notarios Públicos, personas del sector público y empresas que han fabricado documentos falsos para ocasionar despojos, pero no están involucrados del todo los asesores inmobiliarios, manifestó.
Aseguró que, como parte de las condiciones de mantener una ética profesional y código de conducta responsable la AMPY-Mérida “hizo una limpieza” para retirar de la membresía a empresas que no cumplían con las exigencias de compromiso de velar por el interés de sus clientes y trataba de aprovecharse de las condiciones de la asociación para otros fines.
Abundó que, el sector inmobiliario en Yucatán está creciendo a un ritmo del 8 por ciento anual y que en 2022 se lograron vender unas 8 mil casas con un promedio de venta de 1.7 millones de pesos, generando ventas totales por un estimado de 9 mil 300 millones de pesos, 3 mil millones de pesos más que en 2019, subrayó.
