[vc_row][vc_column][vc_column_text]Encerrado en su consultorio particular permanece el alcalde de Muna, Rubén Carrillo Sosa, para no responder a las quejas de enojados ciudadanos que denuncian la tala de árboles en el parador turístico de la localidad, ubicada en el paso hacia la zona arqueológica de Uxmal.
El problema surgió a raíz de que el presidente municipal mandó a podar las ramas de los árboles en el mencionado parador, pero los empleados municipales, literal, no se fueron por las ramas sino que talaron los árboles.
Implacable, pero más injustificadamente, cayeron almendros, guanabanas y otros árboles que daban sombra a las artesanas que venden ahí.
La orden de podar las ramas se dio porque desde hace dos meses se roban la cablería que alimenta las palapas. En varias ocasiones las artesanas han comprado cables para reponer las instalaciones, pero ya cansadas recurrieron al alcalde, quien les negó el apoyo.
Luego de mucho insistir, el presidente mantuvo su actitud de no recibirlas y comisionó al secretario municipal, Martín Várguez, para que las atienda.
El funcionario les sugirió que gestionen ante la CFE el cambio de voltaje de las instalaciones para evitar que se roben la cablería, pero para ello era necesario despejar el tendido de la paraestatal.
En consecuencia mandaron a empleados municipales a podar las ramas, pero en lugar de hacer esto tumbaron los árboles, lo que causó indignación en las artesanas y en todo aquel que se entera de los hechos, incluyendo turistas.
Ciudadanos denuncian que el alcalde se lavó las manos y se encierra en su consultorio médico para evitar atender en el palacio municipal a los enojados vecinos por este asunto.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]