[vc_row][vc_column][vc_column_text]Luego de unas horas de no ver a su hermano mayor, Tomás Canul May, de 68 años, fue a visitarlo para ver cómo estaba, pero se encontró con la sorpresa de verlo muerto, recostado en una hamaca y en estado de descomposición.
La última vez que vio con vida a su hermano Francisco, de 75 años, fue el domingo por la mañana en su natal Cansahcab.
Casi a diario se veían y el lunes por la tarde no fue la excepción, pero cuando llegó a la cada de su hermano le llamó la atención que la puerta trasera estuviera abierta.
Al entrar encontró muerto a su hermano, recostado en una hamaca. El cadáver ya empezaba a descomponerse.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]