Las pensiones municipales hoy están comprometidas, incluso en riesgo de perderse. La continuidad de esquemas financieros con antecedentes controvertidos y la falta de transparencia afectan directamente a los trabajadores estatales y municipales.
Una modificación al contrato del fideicomiso del SIRJUM fue realizada por Alejandro Iván Ruz Castro (presidente municipal interino) el 6 de mayo de 2021, justo cuando Renán Barrera solicitó licencia para reelegirse. Esta maniobra le evitó responsabilidades.
Dos administraciones panistas y dos priistas pusieron al borde del colapso a las instituciones encargadas de garantizar las pensiones, utilizándolas como cajas de ahorro personales.
En 2018, un partido “diferente” tomó el Estado, pero la realidad demostró ser una simulación: Mauricio Vila Dosal mantuvo la deuda en 3,085 millones y aprobó reformas para incrementar aportaciones de los trabajadores de 9% a 15% y elevar los requisitos para jubilarse a 35 años de servicio y 65 de edad.
Las retenciones hechas a los trabajadores no son del gobierno: son de ellos. Arriesgar ese dinero en empresas acusadas de fraude es inaceptable.
Continuará…