Un vecino de la calle 29-B por 46 de la colonia San Juan Bautista vivió una tarde de domingo que no olvidará pronto, cuando, al intentar hacer limpieza en su predio, terminó encontrando un cadáver en estado de descomposición.
David M., armado con sus herramientas y buena voluntad, ingresó al monte para enfrentar el desafío del día: el mal olor que lo recibió de inmediato. “No era un zorrillo”, pensó, mientras avanzaba unos metros hasta que el misterio se resolvió de la peor manera: un cuerpo sin vida y en avanzado estado de descomposición.
Atónito, dio aviso a las autoridades, quienes llegaron para acordonar el área y realizar las diligencias correspondientes. Personal de la Fiscalía General del Estado se encargó del caso. La identidad del fallecido sigue siendo un misterio.