Apenas se paró en la puerta de la casa de su sobrino, en el fraccionamiento Jardines de Yucalpetén, una meridana de 49 años percibió un olor desagradable, lo que le causó preocupación.
La mujer sabía que su sobrino de 66 años vivía solo. La última vez que lo vio con vida fue el sábado y ayer que fue a visitarlo por la tarde lo encontró muerto.
Los hechos ocurrieron en una vivienda de la calle 59-B de Jardines de Yucalpetén aproximadamente a las 3:30 de la tarde, cuando L.G.G., de 49 años fue a visitar a su sobrino E.G.O.
Desde que se acercó a la vivienda sintió un olor nauseabundo y enseguida pidió ayuda a la policía.
Con autorización de la solicitante, entraron a la casa y encontraron al hombre muerto, recostado en una cama.