[vc_row][vc_column][vc_column_text]Los pocos empleados del ayuntamiento de Izamal que aún asisten a trabajar están preocupados por el panorama incierto que rodea el proceso de entrega-recepción a las nuevas autoridades.
Saben que las demoras injustificadas para concluir el proceso son peligrosas y pueden esconder grandes desvíos de recursos, dinero que no es de los alcaldes sino de los izamaleños.
Pero quienes más debieran estar preocupados parecen ni siquiera inmutarse. La alcaldesa interina Leticia Rosado Leal, quien es la responsable directa y debiera ser la más interesada en llevar a cabo este proceso de la mejor forma, es la menos involucrada en el tema.
Por su parte, el alcalde con licencia y hoy diputado local electo, Warnel May Escobar, se ve demasiado relajado preparándose para asumir su nuevo cargo, sin importarle el desastre que, según denuncian empleados municipales y ciudadanos, dejó en el ayuntamiento de la Ciudad de las Tres Culturas.
Este lunes se le vio en la reunión que convocó el senador electo Jorge Carlos Ramírez Marín con diputados y alcaldes electos del PRI.
De acuerdo con un escrito que llegó a nuestra redacción, el proceso de entrega-recepción es incierto, y al parecer la estrategia de la administración municipal saliente es dar largas para ocultar, o bien por la falta de personal capaz en esta administración.
“Es conocido de todos los izamaleños que en los últimos meses la presidenta interina Leticia Rosado Leal, quien a todas luces es la responsable y debiera ser la más interesada en llevar a cabo este proceso de la mejor forma, es la menos involucrada en el tema”, indica el documento.
“Todo esto debe tratarse con la seriedad que corresponde, ya que se puede incurrir en graves anomalías, o ¿se están haciendo esfuerzos por encubrir irregularidades en Izamal?”, se preguntan los denunciantes.
“Todos sabemos el ‘enriquecimiento rápido’ y descarado del anterior ex alcalde, ahora diputado electo, la gravedad está en el abandono del palacio municipal, donde desde hace ya más de tres meses no se atiende a la ciudadanía, no se dan respuestas y al parecer ha llegado al límite de querer tampoco cumplir con sus responsabilidad de hacer una entrega ordenada y correcta, que de forma irregular se ha suspendido sin mayor razón, lo que deja lugar a muchas especulaciones”.
“Es deber de toda autoridad rendir cuentas y llevar un gobierno con transparencia, orden y resultado ante la ciudadanía, por eso existe la preocupación en los pocos empleados del Ayuntamiento que aún asisten a trabajar, pues saben que estas demoras injustificadas, son peligrosas y pueden esconder grandes desvíos de recursos, recurso de los izamaleños”, concluyen.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]