[vc_row][vc_column][vc_column_text]Los tentáculos de la mafia inmobiliaria que operó durante el sexenio del ex gobernador Rolando Zapata Bello se extendieron hasta la costa yucateca, donde fueron despojados terrenos nacionales en una franja de playa de 2.5 kilómetros.
Las tierras en cuestión se ubican en el municipio costero de Dzilam Bravo, donde se construye un parque eólico.
Sin embargo, no es el único caso pues también se menciona que los tentáculos de esta mafia inmobiliaria costera llegaron hasta Celestún.
El despojo a la nación en Dzilam Bravo salió a la luz pública a raíz de un pleito legal entre la Marina Armada de México, que proyecta construir una estación naval en dichos terrenos, y uno de los supuestos propietarios, que en realidad tienen títulos falsos.
En todas las operaciones sale a relucir el nombre de Mario Peraza Ramírez, quien fue director del Catastro de octubre de 2015 hasta que renunció para ser candidato del PVEM a la presidencia municipal de Motul, donde perdió.
El modus operandi es, a grosso modo, el siguiente: mediante una sesión de cabildo se declararon como parte del fundo legal tierras de la nación, que posteriormente fueron cedidas a título de donación a empresas inmobiliarias, que posteriormente las vendieron a particulares.
Quienes adquirieron esos predios han sido víctimas de un millonario fraude que involucra a autoridades municipales, escribanos, notarios, el Catastro, el Insejupy y otras dependencias que avalaron los trámites.
No sería la primera vez que el Insejupy en el sexenio de Rolando Zapata se involucra con la mafia inmobiliaria.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
