Representes de la empresa automotriz Toyota Mérida fueron citados a una audiencia en la delegación Yucatán de la Profeco, por el presunto fraude en contra de una cliente.
De tal forma, que el próximo cuarto de diciembre ambas partes tendrán una reunión para esclarecer los hechos y en su caso llegar a un acuerdo de reparación del daño.
Como informó hace unas semanas Yucatán Ahora, la señora Vanessa Rodríguez denunció haber sido víctima de fraude por parte de la empresa automotriz Toyota México Motor Sales, pues le habrían vendido como nuevo un vehículo usado y en mal estado.
Según narró, el pasado 17 de agosto adquirió un vehículo Corolla 2023 supuestamente nuevo, ya que ninguna de las otras opciones de autos que deseaba estaba disponible o eso fue lo que le comentó el vendedor, así como que tenían un tiempo de entrega de 6 meses a 2 años.
“Yo lo que quiero es solicitar que la voz de una consumidora de Toyota México Motor Sales llegue al director Guillermo Díaz Arana, por un fraude que me hicieron en la agencia Toyota Altabrisa/Montejo”, aseveró.
Expuso que el vendedor que la atendió le comentó que la unidad roja que se había apartado y que ya no tardaba en llegar se adelantó la llegada de un auto Corolla 2023 color gris, “mismo que era un auto DEMO y que en ningún momento se me indicó que era un DEMO con detalles de uso, sin embargo, esta unidad fue la que se me entregó haciéndose pasar por una unidad nueva”.
El vendedor está mal capacitado, continúo, ya que me mostró una unidad que tenía volante en piel, descansabrazos al color de la carrocería, y luces de cortesía en las viseras solares, incluso en la página de la Toyota decía que tenía volante en piel; incluso, debido a esta queja acaban de modificar su página, sin embargo, tenemos la prueba de esto, con lo que demostramos el dolo y la mala fe de Toyota.
“Cabe señalar que la unidad que me entregó el vendedor era diferente y además al preguntarle me dice que tal vez se equivocaron en la versión, sin embargo, jamás respondió por su error”, lamentó.
Indicó que, al comenzar a visualizar la unidad desde el día de la entrega, vio el toldo maltratado y el jaloneo del auto, por lo que, al investigar con personal cercano a la agencia, le indicaron que en efecto era un auto usado, que ya tenía tiempo en la agencia, que se vendió a otro cliente, sin embargo, al final canceló el trámite, y que apenas llegarían autos nuevos.
La quejosa señaló que los de la agencia
quieren pintar el auto ya que tiene defecto en el toldo y quieren volver a abrir el auto “nuevo” que, por garantía, “mientras piensan que no me he enterado de su fraude”.
Adicional a esto, agregó, se metió una extensión de garantía que no sirve para nada, un seguro de auto GNP, que te meten por default y que también hay engaños hacia los clientes.
“Mi petición es que se hagan responsables de su error y que se me cambie la unidad ya que esto es un fraude, fueron omisos en decir que la unidad era usada, el vendedor ha hecho lo posible por retrasar que se me resuelva esto e incluso me ha presionado y maltratado diciendo que no debo seguir ‘escarbando’ en el tema”, subrayó.
