Un Nissan Sentra quedó completamente calcinado en la carretera hacia Hunxectamán, comisaría de Umán, tras incendiarse poco después de salir del taller mecánico.
El conductor, quien iba a recoger a su hija, percibió un olor a quemado al llegar a la entrada del poblado. Al consultar con su mecánico, este le aseguró que el olor era “residuo normal” tras la reparación del motor. Sin embargo, el humo negro y las llamas desmintieron esa explicación.
El hombre logró salir ileso mientras el auto fue consumido por el fuego. Aunque los bomberos sofocaron el incendio, solo quedaron restos carbonizados del vehículo. La responsabilidad del taller está bajo la lupa.