[vc_row][vc_column][vc_column_text]Con una alternativa saludable y con la finalidad de ser un opción que contribuya al cuidado del medio ambiente, tres jóvenes yucatecas crearon champús en barra hechos de manera artesanal que buscan decirle adiós al plástico.
Se trata del proyecto Kukui Mid, que es conformado por las estudiantes Rosario Jiménez Roche, Mariana Madariaga Rodríguez y Dioné Triay Alzina, quienes han creado cuatro tipos de champús para cabello normal o mixto, graso y seco, junto con un acondicionador sólido.
Kukui Mid nació como un proyecto escolar de la materia Desarrollo de Modelo de Negocios de la Facultad de Contaduría y Administración de la Uady, el cual ha ido creciendo hasta ser uno de los proyectos locales más aceptados entre la gente, al contribuir con dos beneficios al mismo tiempo.
“Nos pedían hacer un producto o empresa y no queríamos hacer algo que solo nos genere dinero o vender, sino queríamos resolver alguna problemática y vimos el problema del plástico y la basura, entonces decidimos hacer algo que tenga que ver con reducir el impacto del plástico al medio ambiente hasta que nos salió el producto”, señaló Rosario Jiménez.
“Aparte de reducir el impacto del uso de plástico, también queríamos tener un producto natural y menos dañino para el cabello, ya que los champús normales tienen químicos, entonces nació esta alternativa más ecológica y natural”, complementó Mariana Madariaga.
Tras surgir la idea, las estudiantes realizaron trabajos de investigación para elaborar el producto y una investigación de mercado, con la finalidad de saber sobre lo que le interesaba a la gente, en el que después de un lapso cercano a dos meses, lograron conseguir el producto final.
“Fue un poco estresante al comienzo porque teníamos la idea, pero no sabíamos como hacerlo, pero ya en el proceso lo queríamos hacer bien, entonces nos pusimos las pilas, investigamos, hicimos pruebas, experimentamos, nuestra familia lo probó, hasta que al final salió y fue bien aceptado”, mencionó Rosario.
El proceso:
Se trata de un trabajo totalmente artesanal, en el que los ingredientes son colocados en conjunto, hasta formar el producto sólido, el cual no se coloca en recipientes.
En un lapso cercano a las dos horas, pueden producir hasta 10 distintos jabones. Cuentan con versiones de 40 y 80 gramos.
Para el cabello normal o mixto cuentan con el champú de coco, que es elaborado con aceite de coco, aceite de oliva, aroma, entre otros complementos.
Para cabello seco hay dos champús, el de choco almendra, que está hecho de manteca de cacao, aceite de almendra y proteínas, así como el shampoo de trigo, hecho a base de aceite de trigo y aceite de coco.
El cuarto champú para cabello graso, está hecho con gel natural de aloe vera.
El acondicionador es elaborado con manteca de cacao, queratina y gotas de seda.
¿Como se usa?
Las estudiantes recordaron que se pueden utilizar de diferentes maneras, ya sea frotando el producto en las manos hasta generar espuma y colocarlo en el cabello, o bien frotarlo directamente al cabello.
Es importante que después de utilizarlo se coloque en algún sitio alejado del agua o la humedad con la finalidad de prolongar su duración.
¿Los puede usar cualquier persona?
Si, se trata de champús como cualquier otro, pero ecológicos, artesanales, locales, especializados y con un delicioso aroma.
Al respecto, recordaron que “a algunas personas les puede dejar el cabello un poco seco porque normalmente lo que usan tienen químicos, entonces al cambiar al champú natural, la reacción es diferente y puede quedar seco, es normal y puede que algunos tipos de cabello le lleve pocos días adaptarse, pero son muy pocos y posteriormente se acostumbran”.
Emprendimiento
Como parte de su proyecto final, las jóvenes tenían que vender su producto en un punto específico, donde posteriormente se tuvo una gran aceptación que generó un interés en ellas para aprovechar la oportunidad de emprender.
“Vimos que tuvo muy buena aceptación, a la gente le interesaba, se vendía y nos dimos cuenta que se trataba de una gran oportunidad y decidimos emprenderlo”.
Además, recientemente se integraron al Centro Municipal de Emprendedores, donde han recibido ayuda en mentoría, capacitaciones y cursos, los cuales han hecho que sigan creciendo, e incluso están por registrar la marca.
“Estamos bastante felices de que un proyecto de la escuela que inició hace un año ya esté creciendo, era algo que no nos esperábamos”, comentaron.
Las emprendedoras invitaron a probar sus productos que han comenzado a ser parte del cambio para contribuir con el cuidado del medio ambiente.
“Que se animen a probar cosas nuevas, porque mucha gente piensa que es difícil contribuir para que el mundo esté mejor, pero con acciones chiquitas como esta se hace el cambio y es un beneficio para el medio ambiente y a nosotros mismos”, finalizaron.
Los productos se pueden adquirir a través de encargos y también participan en diversas ferias, bazares y cada mes en el Mercado Cero Basura. Además, planean producir diferentes productos de higiene personal próximamente.
‘Kukui’ es otro nombre para la nuez de la India y en Hawaii es común regalar collares hechos de Kukui a amigos o gente cercana, como símbolo de amistad y alegría, valores que también forman parte del proyecto.
Si deseas saber más sobre el proyecto o adquirir productos de las jóvenes emprendedoras, puedes seguirlas en redes sociales como Kukui. #ConsumeLocal.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]