Un trabajador de la construcción vivió para contarlo luego de estar a punto de ser aplastado por un enorme árbol de huaya que fue derribado por las fuertes rachas de viento registradas esta tarde en esta localidad.
El dramático incidente ocurrió cuando el hombre se encontraba laborando en una obra y, aparentemente distraído, no escuchó los gritos de uno de sus compañeros que le advertía del peligro inminente: el árbol se mecía de forma violenta y amenazaba con caer.

Instantes después, el árbol se desprendió de raíz, pero afortunadamente su caída fue frenada por otro árbol cercano y por unos andamios que estaban debajo. Esto evitó una tragedia.
Milagrosamente, el trabajador resultó ileso, sin golpes ni lesiones, en un hecho que pudo haber terminado en tragedia. Autoridades locales hicieron un llamado a extremar precauciones ante condiciones climatológicas adversas.