En medio del proceso de renovación de su dirigencia, el Colegio de Psicólogos del Estado de Yucatán, enfrenta una fuerte crisis interna.
Diversos miembros del gremio han expresado su inconformidad públicamente a la actual Mesa Directiva que ha incurrido en prácticas no éticas, para obstaculizar la inscripción de planillas en la convocatoria electoral.
Los señalamientos apuntan a una serie de acciones que, según los denunciantes, buscan asegurar la permanencia de un grupo en el poder, restringiendo la participación democrática dentro del órgano colegiado.
Entre las irregularidades mencionadas se encuentran cambios repentinos en los tiempos de inscripción, plazos acortados sin previo aviso para el pago de cuotas, trabas administrativas y negativas de acceso a documentación clave como las listas de miembros activos.
“Por ejemplo, en la fecha de registro, solo ponen 2 horas para el registro de planillas, es una estrategia clara para descalificarnos o no lograr el registro”, denunció una psicóloga que omite su nombre por temor a represalias.
El descontento ha crecido en las últimas semanas, y varios colegiados han solicitado la intervención del comité de Ética y Asuntos internos del Colegio que está conformado por Rossana de Fátima Cuevas Ferrera, María Eugenia Izundegui Trejo y Modesta del Carmen Rivero C. para que garanticen la legalidad y transparencia del proceso.
Por su parte, la actual Directiva no ha dado ninguna respuesta a las peticiones de los miembros colegiados.
Algunos psicólogos han advertido que, de persistir las irregularidades, podrían emprender acciones legales e incluso impugnar los resultados de la elección si estas condiciones persisten.
“Lo que está en juego no es solo una elección, es la credibilidad de nuestro Colegio y el respeto a la democracia interna”, subrayó un colegiado al que no le permitieron hacer su registro por las trabas interpuestas.
El conflicto ha generado un clima de tensión y polarización que amenaza con fracturar aún más al gremio. En los próximos días se prevé que se realice la asamblea para la elección del nuevo consejo directivo por lo cual le exigen al actual consejo de ética que tome cartas en el asunto para que estas votaciones sean legales y transparentes y no una imposición.
Mientras los problemas de salud en el Estado son un tema de seriedad, los psicólogos comentan con preocupación cómo el ego y la necesidad de poder de la actual presidenta Lourdes Valdez Valdés, no permite avanzar hacia los objetivos reales del colegio.