Susana Guadalupe Cervera Sustayta ha lanzado un desesperado llamado a las autoridades ante la inminente liberación de Edwin M. Can T., el hombre que intentó asesinarla en su propia casa el pasado 4 de febrero de 2025, a pesar de que existía una orden de restricción en su contra.
El agresor, quien ya había sido sentenciado en 2023 por violencia doméstica, fue detenido en flagrancia mientras sometía a la víctima con un cuchillo en el cuello y la amenazaba de muerte frente a sus hijos. Sin embargo, a pesar de la gravedad del ataque y de sus antecedentes, el juez del Segundo Control ha decidido no imputarle intento de feminicidio ni homicidio, sino clasificar el caso como violencia doméstica, lo que ha generado indignación y dudas sobre la transparencia del proceso judicial.
UNA HISTORIA DE VIOLENCIA Y AMENAZAS IGNORADAS
La pesadilla de Susana Guadalupe Cervera no comenzó este año. En 2023, Edwin M. Can T. fue sentenciado por violencia doméstica, recibiendo restricciones para acercarse a su víctima. Sin embargo, incluso desde prisión, continuó hostigándola con llamadas telefónicas.
Cuando recuperó su libertad en febrero de 2024, volvió a buscarla. Se presentó en una barbería en Vergel, propiedad de una prima de la víctima, y comenzó a preguntar por ella. Al notar la situación, los empleados llamaron a la policía, pero antes de ser detenido, Edwin lanzó una amenaza directa:
“Dile a tu pvt@ prima que se declare ya mu3rt4 porque no me voy a cansar hasta verla mu3rt4”.
A pesar de esta amenaza de muerte, las autoridades no actuaron con la contundencia necesaria para proteger a la víctima.
EL INTENTO DE ASESINATO DEL 4 DE FEBRERO
El ataque ocurrió el 4 de febrero de 2025 en el domicilio de la víctima en Ciudad Caucel. Edwin logró ingresar a la casa porque no tenía candado en ese momento.
Bajo el efecto de alcohol y drogas, el agresor tomó un cuchillo de la cocina, sujetó a Susana por el cuello y colocó la hoja sobre su garganta mientras le decía que la mataría.
Su hija embarazada, quien enfrenta una amenaza de aborto, logró escapar y llamar al 911. En la llamada, desesperada, alertó a la policía de que su madre estaba a punto de ser asesinada.
Gracias a la rápida respuesta de la policía, Edwin fue encontrado en plena agresión y fue detenido con el cuchillo en la mano.
¿POR QUÉ NO SE LE IMPUTA INTENTO DE FEMINICIDIO?
A pesar de la gravedad de los hechos, las autoridades han decidido clasificar el caso como violencia doméstica, ignorando las pruebas y minimizando la agresión.
Esta grave omisión permitirá que Edwin M. Can T. recupere su libertad este 26 de febrero de 2025, poniendo en riesgo la vida de Susana y su familia.
UN GRITO DESESPERADO POR AYUDA
Ante esta injusticia, Susana Guadalupe Cervera Sustayta hace un llamado urgente a las autoridades, en especial al gobernador del estado, Joaquín Díaz Mena, para que intervenga y evite que su agresor quede en libertad.
Las víctimas de violencia de género no deben ser ignoradas.
Este no es solo un caso más, es un intento de feminicidio que no debe quedar impune.