[vc_row][vc_column][vc_column_text]La actual disminución de la incidencia delictiva en el Estado es consecuencia de la desconfianza de la ciudadanía hacia el actual sistema de justicia, afirmó el director de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY), Carlos Alberto Macedonio Hernández, quien advirtió que de ésta manera aumenta la impunidad.
Explicó que la ciudadanía aún no se acostumbra al Sistema de Justicia Penal Acusatorio y Oral, así como el nuevo Código Procesal Penal que lo sustenta, el cual entró en vigor el 15 de noviembre de 2011, y se tornó válido para todo el Estado, a partir del 3 de junio de 2014.
“La mayoría de las personas pretender que al denunciar, la persona a que acusaron de manera inmediata sea recluido al Centro de Reinserción Social (Cereso), pero al ver que ya no lo logra, han dejado de acudir al Ministerio Público”, acotó.
Aclaró que de acuerdo con el estudio efectuado por la Máxima Casa de Estudios se observó que cada vez son más las personas que se abstienen a interponer una denuncia penal, por ende, aumenta la impunidad, ya que el presunto delincuente no es procesado.
De acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) de la Secretaría de Gobernación, en los primeros ocho meses del año, en Yucatán se interpusieron 19 mil 900 denuncias de fuero común, con una disminución del 15.3 por ciento con respecto al mismo período de 2016, cuando la suma fue de 23 mil 504.
A excepción del homicidio calificado, delito que se sigue por oficio, en todos los demás incidentes se observa un decremento, en algunos casos, de manera considerable.
Macedonio Hernández remarcó que “no ha disminuido la incidencia delictiva, simplemente ya son pocas las personas que acuden a las agencias del ministerio público para interponer la respectiva denuncia”, subrayó.
Según la “Incidencia Delictiva del Fuero Común”, la incidencia de lesiones ha disminuido en 37.2 por ciento, seguido de los delitos patrimoniales, con el 34.6 por ciento, robos en 12.6 por ciento, los sexuales en 6.1 por ciento, y los homicidios, en 5.4 porcentual.
Sin embargo, los delitos dolosos tienden al aumento y tan sólo en el segundo cuatrimestre del año, el incremento fue del 18.75 por ciento, de los cuales, hay 10 feminicidios, además que varios siguen impunes.
De enero a septiembre de 2016 fueron 32 hechos cometidos con premeditación, alevosía y ventaja, y ahora la cifra es de 38.
Hoy en día, el presunto delincuente no pide la cárcel, a menos que sea un delito grave como es el homicidio o formar parte del crimen organizado, además que en todo momento tienen un trato especial a sus derechos humanos.
“En el nuevo proceso penal, el presunto implicado ya no necesita la prisión preventiva, por lo que el conflicto se resuelta de manera directa entre la víctima y el victimario.
“La sociedad está acostumbrada a que el ladrón, de manera inmediata va a la cárcel, pero ahora se dan cuenta con no son encarcelados, por lo que eso los decepciona y crea desconfianza en el nuevo sistema”, abundó.
Consideró de importante y urgente el establecer un trabajo directo con la sociedad, para que se les explique el proceso del nuevo sistema y de ésta manera, empezar a derribar la barrera que ya se empieza a establecer.
Actualmente, se dan cursos de capacitación a los fiscales, defensores de víctimas y mediadores, entre otros, pero no hay una orientación directa hacia la sociedad.
La mejor preparación del personal jurídico permitirá que la sociedad recobre la confianza de la denuncia, al mismo tiempo que comprenda mejor el nuevo sistema de justicia, concluyó.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]