[vc_row][vc_column][vc_column_text]El estado de Yucatán tiene claroscuros en la valoración de la salud sexual, hay una ley estatal que establece la responsabilidad del estado para atender este rubro, pero, como muchas leyes, no se aplica, afirma la doctora Ligia Vera Gamboa.
Al conmemorarse el este el Día Internacional de la Salud Sexual, declarada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2011, Vera Gamboa, investigadora y docente del Centro de Investigaciones Regionales Hidelo Noguchi, de la Universidad Autónoma de Yucatán señaló que, México, pero en particular Yucatán aún está lejos, de cumplir las condiciones de libertad y corresponsabilidad social que tiene la población en sus derechos sexuales.
Hay avances, dijo, hay programas del gobierno federal y estatal, hay miles de millones de pesos de recursos, pero nadie sabe a dónde van estos recursos y porqué, no llegan estos programas a toda la sociedad. Hay una gran distancia entre los problemas que se viven en el medio urbano y la condición de las personas del medio rural, asentó.
Ligia Vera explicó que, en pleno siglo XXI, las condiciones de desigualdad de la sociedad marcan los problemas lacerantes que impactan a los diferentes segmentos de la población, la violencia, la pobreza, la ignorancia no permiten que la sociedad pueda vivir de manera más consciente el valor de los derechos de las personas en cuanto a su sexualidad.
Destacó que, algunos sectores de la sociedad civil avanzan, pero no así, los distintos niveles de gobierno. Es preciso establecer una agenda común, sociedad y gobierno, con un discurso y un mensaje sólido y contundente en favor de los ciudadanos que luchan por los derechos y la salud sexual de la comunidad.
Es un problema de toda la sociedad, recalcó, de ahí que todos tenemos la responsabilidad de poder conocer, informarnos y reproducir los mensajes de tolerancia y respeto para las personas diversas, pero también para educar a los niños y jóvenes y desterrar el machismo, los discursos de odio y las agresiones contra las personas de la diversidad sexual, recalcó.
Tenemos que ser capaces de dejar muchas de los reflejos de barbarie que durante años se impusieron como mecanismos de soporte de poder del hombre sobre a mujer, uno de ellos el matrimonio infantil, sostuvo.
Esta situación ya no es consentida legalmente en Yucatán y Campeche. Pero hay más, porque muchos adultos abusan sexualmente de una menor e intentan solucionar el problema casándose, esto es una doble condición, porque obligan a una menor a vivir con su agresor para siempre.
Es preciso que la sociedad en su conjunto tenga presente la responsabilidad de respetar, aprender a convivir y corresponder a la seguridad y el ejercicio de libertades que tienen todas las personas. La modernidad nos acera a los problemas que viven los chicos y chicas transgénero, pero también los chicos que antes se llamaban travestis, (que se visten de mujer) y que hoy se establecen como diversos y diversas, repuso.
También la modernidad nos permite atender y entender a los niños y niñas que nacieron con una sexualidad biológica, pero que no responden a esa personalidad y buscan expresarse conforme a sus sentimientos para ser una persona integrada a la sociedad, repuso.
Con mucho, los retos del nuevo gobierno estatal establecen una mayor vinculación y sensibilidad sobre estos problemas y el entendimiento a establecer políticas públicas dirigidas a este sector de la sociedad para que sean parte integral de la población y de la misma manera participen en las tareas que establece la sociedad de manera amplia y plural, recalcó.
Tenemos que entender que la salud sexual de las personas tiene como factor fundamental la salud mental, la sensibilidad, el equilibrio, la tolerancia. Es preciso que la educación sexual se inicie desde los primeros grados de primaria y que los padres de familia participen y se solidaricen con el pensamiento de la igualdad, para dar un soporte a sus hijos, que podrán opinar sobre el ejercicio de valores que se imparten en el seno familiar.
Las condiciones para establecer una sociedad equilibrada, es el ideal para que todos los elementos que integran esta población, sean productivos y participativos, igualitarios y cumplan con el propósito de crecer educados en la aceptación de valores incluyentes y solidarios, concluyó.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]