[vc_row][vc_column][vc_column_text]Entre las familias de la Península de Yucatán aún prevalece el tabú de negar la atención oportuna a personas con labio y paladar hendido, reconoció la coordinadora médica del Shares Florida del Hospital Internacional de Rotarios, María del Socorro Flores Méndez al advertir que tal postura sólo provoca serios problemas de personalidad entre los afectados.
Afirmó que la situación se complica aún más en las escuelas, donde los menores de edad que tienen éste problema congénito son víctimas del bullying o bien, en los hogares están sobreprotegidos.
Mencionó que los menores de edad de la región Sur-sureste del país tienen el doble riesgo de padecer éste problema de salud, en comparación con los del Norte.
“En las entidades de Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán, la incidencia de éste padecimiento es de un caso por cada 500 nacidos vivos, mientras que en el norte de la República Mexicana, uno de cada mil”, subrayó.
Afortunadamente, en lo que va del año, los estados que conforman la Península de Yucatán están entre las 12 entidades federativas con menor incidencia.
La también directora de la Clínica Estatal de Labio Leporino y Paladar Hendido “Todo por una sonrisa” destacó la importancia de que los padres de familias permitan la pronta atención médica de los bebés que presenten el problema, para que puedan tener un mejor futuro.
“Es necesario fomentar entre los padres de familia la importancia de la intervención quirúrgica oportuna, para garantizar un mejor desarrollo al paciente”, acotó.
Comentó se trata de un problema multifactorial, es decir, influye el medio ambiente, la automedicación, la carencia de ácido fólico, el consumir alcohol, drogas y tabaco, así como de tipo hereditario, cuando dos parientes se casan, etc.
Aunque es un problema que se refleja en familias pobres, aclaró que este padecimiento no distingue posiciones sociales.
“La mayor parte (de los padres de recién nacidos) son personas de nivel socioeconómico bajo, pero también se da en algunos pacientes de nivel medio, e incluso, alto”.
En torno a las causas, explicó que “es multifactorial, puede ser que el papá sea alcohólico o drogadicto, asimismo, porque la mamá tomó una aspirina al inicio del embarazo, por algún cuadro viral al inicio de la gestación, y en el 30 por ciento de los casos, dependen de factores hereditarios.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]