[vc_row][vc_column][vc_column_text]Música, danza y artes visuales se dieron la mano en el Centro Cultural del Sur durante la primera clausura de talleres artísticos. Fue una tarde de colores, presentación de talentos y convivencia para demostrar que la cultura es puente de unión de toda la sociedad.
Luego de cuatro meses de actividades, el centro cultural se ha transformado en un espacio para todos, donde chicos y grandes han tenido la oportunidad de desarrollar habilidades artísticas y culturales.
En esta primera clausura de cursos tomaron parte 150 alumnos que se inscribieron a los 19 talleres que funcionaron de abril a principios del mes de agosto con gran aceptación y éxito.
Más de 300 personas, principalmente padres de familia, colmaron el anfiteatro. Desde niñas de tres y cuatro años en clases de jazz y ballet hasta señoras mayores demostraron sus dotes de canto sorprendiendo a los asistentes.
Los pequeños Jonathan Jaziel y Yafred Alexander Salazar Erosa estaban muy nerviosos por la cantidad de gente que había. Ellos asistieron al Taller de Orquesta de flautas recorder, clases que nunca habían tomado pero que les pareció bonito aprender, comentaron. Los nervios se transformaron en sonrisas al bajar de la tarima al final de la presentación. “Todos le echaron ganas, lo hicieron bien y nuestros papás felices porque era algo que no habíamos hecho”.
La clausura no se limitó a los talleres de música y danza, las dos especialidades con más demanda en el lugar. Los salones también sirvieron de foro de exposición para conocer a quienes se avocaron a las artes visuales con proyectos de pintura, cartonoería mexicana, con trabajos de alebrijes en papel maché, fotografía y dibujo donde predominó el color.
A nombre de los alumnos Aylinne Monserrat Aranda Vera, del taller de Ballet 1 agradeció al Ayuntamiento de Mérida por contar con las instalaciones del centro cultural, exhortó a que se realicen más talleres e invitó a la comunidad a participar.
Durante más de dos horas la velada artística incluyó números de música del grupo de Formación Integral con “Huayno de la roca” y un arreglo musical de autoría propia y las coreografías “Un pequeño paraíso encantado” y “El gran Showman” de las niñas de ballet clásico y jazz, respectivamente.
De tan solo seis años, Ángel Suriel Aké Molina ejecutó en el clavinova “Melodía” de Lupe y Roberto (método John Thompson), mientras que otro grupo de compañeros del taller de Orquestas de flautas recorder llenaron de música con los temas “El diálogo” (Jonathan – Daniela), “Una vez hubo un juez” (Graciela Sanbak), “Sinfonía del nuevo mundo” (Anton Dvorák), “Himno a la alegría” (Beethoven) y “Dona Nobis Pacem” (Anónimo).
El sonido de las guitarras se dejó escuchar con un Popurrí en Círculo de Do mientras que los talleristas de Canto Coral, en el que figuraron los alumnos de mayor edad, rindieron un homenaje a la música de trova yucateca con temas de Ricardo Palmerín, Pepe Domínguez y Carlos Duarte como “Nunca”, “Granito de sal”, “Las golondrinas yucatecas” y “Aires del Mayab”.
El semillero seguirá rindiendo frutos ya que el próximo lunes 27 de agosto el Centro Cultural del Sur será escenario de los avances de los talleres de Teatro I y II con la presentación de las obras “El manojo de hierba” y “Los preciosos ridículos”, con 25 alumnos en escena, mientras que el taller de Ensamble Musical está preparando un recital de música vernácula. La entrada será gratuita.
Es así como el Centro Cultural del Sur confirma su vocación como una obra que ha logrado detonar el desarrollo artístico y cultural de esa zona de la ciudad, con oportunidades de crecimiento para todos.
En la velada estuvieron presentes el Regidor José Luis Martínez Semerena, el maestro Felipe Ahumada Vasconcelos, Director, de Cultura u la Licda. Beatriz Eugenia Gómory Correa, presidenta de la Fundación del Empresariado Yucateco, A.C. (FEYAC).[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]