En un hecho que ha causado indignación, un joven identificado como Rodrigo Z. agredió brutalmente a una mujer de la tercera edad, golpeándola contra una pared y provocándole una herida profunda en la frente, sin que hasta el momento las autoridades hayan actuado en su contra.
La víctima, Sonia Lozano Bonilla, denunció ante la Fiscalía Especializada en Delitos contra la Mujer haber sido atacada por Rodrigo Z., hijo de su esposo, quien junto con sus hermanos Alberto Z. y Luz María Z. también la insultó, amenazó y la despojó de la vivienda donde residía.
Los hechos ocurrieron el 4 de octubre pasado, cuando Sonia acompañó a su esposo —quien se encontraba enfermo— a una clínica en la avenida Itzáes. Mientras esperaban el diagnóstico médico, los hijos del señor Zahul comenzaron a agredirla verbalmente, acusándola del estado de salud de su padre.
En medio de los insultos, Rodrigo Z. la sujetó y la lanzó violentamente contra una pared, ocasionándole una lesión grave arriba del ojo, que tuvo que ser suturada por un cirujano plástico.
“Me gritó que me odiaba, me aventó contra la pared y me abrió una herida arriba del ojo. Me mandaron al cubículo de al lado, llena de sangre, sin dejarme hablar con mi esposo”, relató la víctima, quien aún presenta secuelas visibles de la agresión.
A pesar de la denuncia formal y de las pruebas médicas, ninguno de los agresores ha sido detenido. Sonia, además, fue expulsada violentamente de su hogar, quedando sin pertenencias, documentos ni medios de comunicación.
El caso permanece sin avances en la Fiscalía, mientras la mujer —de edad avanzada y en condición vulnerable— clama justicia ante la indiferencia de las autoridades, que hasta ahora han permitido que la agresión quede impune.