Familias abarrotan el Centro de Convenciones interesados por las innovaciones en el campo

[vc_row][vc_column][vc_column_text]La décima edición de la Expocampo Yucatán confirmó que es un evento de éxito y que cumple sus objetivos de promover la comercialización de los productos de los sectores agropecuario, comercial, industrial y de servicios relacionados con el campo.

En tres días, el salón Chichén Itzá del Centro de Convenciones Yucatán Siglo XXI  registró una afluencia de unos 20 mil visitantes, quienes se volcaron no solo a conocer lo que ofrece la Expo sino a adquirir productos de todo tipo, desde miel, chile habanero y flores, hasta toda la línea de productos orgánicos como sábila, carne de carnero, stevia, cerdo pelón, frutas y hortalizas, así como artesanías, herramientas y maquinaria agrícola.

Pedro Cabrera Quijano, presidente de la Fundación Produce Yucatán, organizadora de Expocampo Yucatán 2018 informó que la muestra anual más importante de su tipo en el sureste fue posible gracias al apoyo del gobernador Rolando Zapata Bello y de la Secretaría de Desarrollo Rural (Seder), que con acciones como ésta demuestran su apuesta por el campo, generando la unidad, la motivación y el entusiasmo de los productores.

El titular de la Seder, Pablo Castro Álcocer, recorrió la muestra y dialogó con los productores, agroindustriales e investigadores  del sector rural local. El funcionario tuvo a su cargo la clausura del evento.

En esta edición hubo cursos de producción de flores de ornato, agricultura orgánica y agricultura urbana, conferencias sobre las semillas de ramón como una alternativa alimenticia, otra conferencia sobre la situación actual de la apicultura. Hubo degustaciones de guisos de conejo, carnero, cochinita de cerdo pelón y de comida maya.

A través de las direcciones de Apoyo  a la Mujer y Grupos Vulnerables y Comercialización de la Seder, participaron más de 100 artesanas y productoras que participan en la Expocampo Yucatán 2018 llegaron de los municipios de Abalá, Buctzotz, Conkal, Dzoncauich, Espita, Halachó, Hocabá, Homún, Hunucmá, Izamal, Kanasín, Ixil, Mérida, Muna, Opichén, Oxkutzcab, Teabo, Tekax, Tekit, Ticul, Timucuy, Tzucacab, Sinanché, Sudzal, Umán, Valladolid y Xocchel.

Contó, como siempre, con la participación de centros de investigación, instituciones educativas, organismos civiles y dependencias vinculadas con el campo, como la Sagarpa.

Poe su parte, el Ayuntamiento de Mérida tuvo una isla con ocho stands donde se mostró cómo en la capital yucateca hay un sector rural de las comisarías que recibe un beneficio económico familiar a través de la preservación de una tradición: el urdido de hamacas.

Ayer, como cada año, el recinto de Cordemex festejó el Día de la Familia con padres e hijos no sólo del sector rural sino de esta ciudad; los visitantes abarrotaron el recinto.

Los expositores reportaron buenas ventas, acuerdos y futuros convenios que se concretarán en el transcurso del año. Se dijeron satisfechos con los resultados y una muestra de ello es que buen número de ellos han manifestado su interés en participar en la siguiente Expocampo y quieren inscribirse desde ahora. Eso conforma que es un evento de éxito y rentable para los expositores.

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