Caso extremo de burla a los jueces y el sistema de justicia en Yucatán

[vc_row][vc_column][vc_column_text]Un delincuente meridano no ha parado de burlarse del nuevo sistema de justicia oral, pues deliberadamente ha dañado tres localizadores electrónicos que le colocaron para que siga su proceso en libertad.

Además, el caso evidencia la falta de criterio de los jueces, pues el sujeto, Rubén Eloy Rojas Ocampo, vive frente a la casa de la denunciante, y es imposible que, estan en libertad, pueda mantenerse a distancia prudente de la víctima, que ahora tiene que esconderse para no ver al individuo.

En cuanto a los localizadores electrónicos, dos los dañó y el tercero lo “formateó” para no ser vigilado.

Y por si fuera poco, está en desacato, ya que no acudió a la audiencia en la que debía pagar los dos primeros localizadores averiados.

Rojas Ocampo fue detenido en julio por robar en un estanquillo de la colonia Azcorra, pero el juez de control Kenny Martins Burgos Salazar le ha beneficiado en tres ocasiones, toda vez que le permitió seguir libre pese a lo anteriormente descrito.

En audiencia de revisión de medida cautelar, Rojas Ocampo debió estar presente para pagar seis mil pesos por haber dañado en dos ocasiones los localizadores.

No llegó a la audiencia y ahora se sabe que logró apagar el tercer dispositivo y se mantiene en calidad de prófugo de la ley.

Este sujeto vive frente a casa de la víctima, pero cuando se le dejó en libertad condicional se le indicó que no debía acercarse a ella, lo que es imposible porque son vecinos.

El 20 de septiembre pasado hubo una audiencia porque la denunciante solicitó modificar las medidas cautelares, y ese día el sujeto argumentó que no dañó el dispositivo, sino que se descompuso.

Para entonces, la SSP lo consideraba el principal sospechoso de un robo cometido en una escuela de la colonia Azcorra, hurto que habría cometido aprovechando que el localizador ya no servía.

Los hechos que dieron origen al caso ocurrieron el 23 de julio, aproximadamente a las 12:30 horas, cuando Rojas Ocampo se introdujo por la puerta principal del estanquillo, ubicado en la colonia Azcorra.

Se apoderó de una cartera con dos mil pesos y huyó, pero fue detenido.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]